Las Flores Comestibles, conócelas!
Las Flores las asociamos a un factor esencialmente ornamental asimismo existen flores comibles que pueden ser parte de nuestros platos.
Formando una parte de el alimento, en ocasiones asimismo van a ser esencialmente ornamentales, mas otras veces pueden formar una parte relevante en el contenido del plato.
Que una determinada especie de planta de sitio a flores comibles no quiere decir que podamos consumir las flores de cualquier planta de esa especie.
Para poder consumirla ha de estar producida para tal fin o bien controlada para asegurar que su consumo sea seguro.
Las plantas cultivadas con fines ornamentales son tratadas con productos que no se deben consumir pues podrían representar un peligro para nuestra salud.
Conoce las Variedades de flores comibles
Hay muchas flores que son comibles, muchas de ellas son flores de plantas que se emplean de forma frecuente en la cocina y las flores acostumbran a tener un sabor afín a la planta, por norma general más suave, veamos ciertas de ellas:
1.Flores en ensaladas:
Albahaca: conocida ya por todos es ideal para ensaladas.
Begonia: suelen ser amargas y de sabor cítrico. Se emplean en macedonias, ensaladas o bien guarniciones.
Los pétalos de crisantemo o bien de magnolia y las flores de jazmín, hibisco y pensamiento se emplean para crear ensaladas de flores como guarnición de las aves y los pescados.
Los pensamientos, en verdad, son muy polivalentes y asimismo acompañan platos de carne, tablas de queso, etcétera
2.Flores acompañadas con carne, pescado o arroz:
Romero: estamos acostumbrados a utilizar las hojas de romero mas las flores son comibles y nos aportan un sabor más suave. Son muy apropiadas para aliñar carnes, pizzas, helados y postres.
Eneldo: de color amarilla sabe de qué forma la planta y como es un acompañamiento fabuloso para los pescados y asimismo mariscos, sopas y salsas.
Diente de león: silvestre de color amarillo intenso tiene un sabor dulce y meloso y resulta ideal para ensaladas y arroces.
3.Flores como guarnición:
Calabacín y calabaza: sus flores son grandes, sustanciosas y de color amarillo un pelín anaranjado. Tienen un sabor algo dulce y son de textura suave. Se pueden freír, arrebozar e inclusive consumir rellenas.
Girasol: los pétalos de esta famosa flor tienen un sabor amargo, mas este se desvanece tras cocerlos unos minutos al vapor. El capullo de girasol se puede cocinar entero, igual que una alcachofa.
Clavelina, clavel o bien clavel chino: son de diferentes colores y tonalidades y su sabor condimentado recuerda tenuemente al clavo y la pimienta.
Se puede utilizar como complemento en ensaladas, mantequillas, galletas, mas asimismo puede formar la guarnición de un plato.
4. Flores para postres:
Lavanda: esta estética florecita azul tiene un sabor intenso y algo ácido.
Se puede usar como acompañamiento de carnes mas asimismo es buen recurso en postres y pastelería.
Violeta: esta bonita flor que da nombre a su color, tiene un sabor levemente mentolado y se emplea en confituras, helados, sorbetes, etcétera
Geranio: pueden ser prácticamente de cualquier color y generalmente ofrecen un sabor y aroma afrutado, específicamente cítrico. Se pueden utilizar de guarnición, en ensaladas y asimismo en pastelería.
5. Flores para dar aromas:
Amapola: empleamos habitualmente sus semillas mas asimismo se usan los pétalos para aromatizar vinos y aceites.
Azahar: se emplean estas pequeñas flores blancas para realizar el agua de azahar, que da aroma a panes y pastelería árabe, primordialmente.
Borraja: es azulada de sabor afín al pepino asimismo se emplea para dar aroma, en un caso así a ciertas bebidas.
De qué manera hemos de consumirlas?
Se pueden usars como parte ornamental, aportando un toque de color al, o como parte substancial del mismo, de manera que sean temtempié, guarnición o bien aun plato primordial.
Ciertas se pueden consumir en crudo mas otras se deben cocer al vapor, por servirnos de un ejemplo, o bien aun freír o bien arrebozar.
Consejos para su conservación:
Ya que acostumbran a ser débiles y caducas, así, debemos seleccionarlas en buen estado, que presenten buen color y fragancia.
Es preferible recogerlas por la mañana antes que el sol sea fuerte. Normalmente desecharemos los tallos, pistilos y estambres y la base blanquecina de los pétalos puesto que estas porciones acostumbran a ser más amargas que los pétalos y no resultan agradables al gusto.
Ya antes de emplearlas debemos lavarlas bien con agua y secarlas esmeradamente para no deteriorar sus pétalos y dejándolas escurrir boca abajo.
Como estas no se preservan demasiado tiempo con lo que es preferible adquirir solo las que vayamos a consumir o bien guardarlas esmeradamente en la nevera.